El mundo de los recursos humanos está siempre evolucionando y adaptándose a las nuevas realidades del mercado laboral, la tecnología y la sociedad. En este artículo, analizaremos algunas de las tendencias más importantes que marcarán el camino de esta industria, así como la forma en que podemos prepararnos o anticiparnos a estos cambios.
Algunas de las tendencias que veremos son: la digitalización y automatización de procesos con IA, la diversidad y la inclusión como factores competitivos clave, el bienestar y la salud mental de los empleados, el desarrollo de habilidades blandas y el aprendizaje continuo, y el liderazgo transformacional y colaborativo. Tendencias que plantean nuevos retos y oportunidades a los profesionales de recursos humanos, que deben mantenerse al día de las innovaciones y las mejores prácticas para gestionar el talento humano con eficacia y eficiencia.
Revolución Tecnológica
Actualmente atravesamos un periodo de cambio tecnológico en cuanto a estilos de trabajo y métodos de producción. Sin duda, este proceso implica la destrucción, creación y modificación de oportunidades de empleo. Las imágenes y relatos que se utilizan para hablar de un futuro con robots, drones e inteligencia artificial invitan a imaginar un mundo de ciencia ficción. Según el punto de vista, hablamos de utopías o distopías en las que el trabajo ya no es una prerrogativa humana. De este modo, se está imponiendo un cierto sentido común basado en la creencia de que los humanos serán sustituidos por robots más pronto que tarde, dando paso a un nuevo mundo post-laboral.
Sin embargo, no parece tan seguro que el impacto de estos cambios en el mundo laboral vaya a ser tan obviamente negativo. Diferentes estudios realizados a nivel mundial sugieren que el uso de la nueva tecnología está aumentando el empleo. ¿De qué forma? La influencia de la digitalización, la conectividad y los avances tecnológicos será transversal y se extenderá a todas las industrias y plataformas. La digitalización de casi todos los sectores económicos, incluidos los servicios, la agricultura y la industria, se demuestra de diversas maneras, algunas de ellas evidentes y otras más sutiles. La generación de empleos se basarán en la transformación de puestos de trabajos para personas que puedan desarrollar y controlar correctamente estas nuevas tecnologías, donde se necesitarán de nuevos empleados o personas con una buena formación y adaptabilidad.
El problema acá es que el mercado laboral latinoamericano ya está fragmentado: En una misma empresa u organización, se les está entregando mejores condiciones de trabajo y mayor remuneración y desarrollo profesional a los trabajadores más cualificados, para de esta forma poder anteponerse a estos nuevos desafíos, pero por otro lado, estas iniciativas coexisten con un mercado laboral marcado con altos niveles de informalidad y condiciones de trabajo precarias o enfocadas solamente en áreas más ejecutivas.
El temor es que el dividendo tecnológico beneficie sólo al capital y no a la mano de obra. Sin embargo, las nuevas tecnologías tienen el potencial de mejorar la vida de la mayoría de las personas. Por ejemplo, mejores condiciones de trabajo, mayor remuneración, reducción de la jornada laboral, reorganización de la distribución del trabajo, remunerado y no remunerado. También pueden servir de catalizador para un cambio en la matriz de producción que sea a la vez social y ambientalmente responsable. En conclusión, se puede dar oxígeno a nuevas formas de organizar la producción y el trabajo.
Es por esto que es fundamental garantizar el cumplimiento de las obligaciones empresariales de invertir en la actualización y certificación continuas para que todas las personas puedan beneficiarse de su uso. Invertir en desarrollo e inclusión social (educación, nutrición, sanidad, planificación social, formación y desarrollo laboral, entre otras cosas) aumentará la productividad de los trabajadores y permitirá obtener más conocimientos.
Además, ha surgido una poderosa tendencia en el desarrollo de diversidad en puestos operativos de las organizaciones, viendo el potencial de esto para el desarrollo de la innovación, creatividad y competitividad en base a los diferentes puntos de vista y culturas de las personas. Esto, al mismo tiempo que las percepciones sociales evolucionan para incluir a varias minorías en puestos de liderazgo, haciendo esfuerzos sobre todo en la selección de recursos humanos y los procesos de gestión, en los que se utilizan datos y tecnología para reducir al máximo los sesgos inconscientes.
Esperanza de vida y Ciclo de vida laboral
Con la prolongación constante de la esperanza de vida promedio, las constantes mejoras tecnológicas en áreas de salud y el creciente costo de vida en los países ha influido directamente en el aumento del ciclo de vida laboral, por lo que la formación continua o la reinvención se han convertido directamente en una necesidad en las organizaciones. Hoy en día, cinco generaciones conviven en una misma organización, lo que exige una buena gestión de las necesidades de cada una de ellas: Desde la gestión de las expectativas ante el envejecimiento hasta la renovación impulsada por los jóvenes talentos. Los modelos de tutoría, en los que los trabajadores de más edad enseñan a los profesionales más jóvenes habilidades que sólo pueden aprenderse a través de la experiencia, son un buen ejemplo de esta nueva realidad laboral. Un punto crítico es que el trabajador individual acepte la formación como parte de su trabajo y que los líderes organizativos apliquen políticas de flexibilidad inclusiva en las diferentes generaciones, además de la adopción y aplicación de políticas públicas y leyes antidiscriminación en todos los sectores.
Tecnología-Humano
La colaboración entre personas y máquinas ha dado lugar a la creación de una nueva realidad que permite imaginar un valor laboral basado en esa combinación. La influencia de la automatización se está extendiendo a otras industrias, ganando terreno en los países en desarrollo, donde supone un reto para las economías emergentes que requieren mucho trabajo manual y poca tecnología, dando paso a la urgencia de las organizaciones de prepararse para un largo periodo de transición mientras revisan su plantilla actual.
En el contexto de la formación tecnológica y la automatización, sigue siendo necesario disponer de competencias humanas que ahora no poseen los robots. En consecuencia, aunque éstos ocupan un lugar en el desarrollo de algunas actividades industriales, las organizaciones seguirán necesitando mano de obra proporcionada por personas. Cuanto mayor sea la automatización, mayor será el valor de mercado de la mano de obra humana para realizar tareas altamente complejas, personalizadas e imprevisibles.
Del mismo modo, es esencial identificar el valor que aporta cada modelo y adaptar la tecnología a las necesidades del talento, lo que poco a poco va acercando a una plantilla más ágil y diversa:
El cambio, ya sea en la organización del trabajo o en la adopción de nuevas tecnologías en explotaciones agrícolas, fábricas y oficinas, es una constante en el mundo laboral. Para capitalizar las transformaciones actuales, abrir puertas y crear oportunidades para el desarrollo humano, los trabajadores deben tener acceso a un aprendizaje continuo. Este será un componente fundamental para que las personas puedan aprovechar las nuevas tecnologías y las oportunidades laborales que puedan surgir en el futuro.
Acceso a una educación y formación de alta calidad impartida por profesores bien formados y bien remunerados, cuyas habilidades, conocimientos y enseñanza no pueden ser sustituidos por la tecnología.
La vida profesional siempre ha incluido transiciones: de la escuela al trabajo, maternidad y paternidad, cambios de trabajo y acceso a la jubilación. Al reto de estas transiciones se añaden transformaciones globales como los cambios tecnológicos y demográficos, así como la transición a una economía con bajas emisiones de carbono. Si las personas reciben apoyo durante estas transiciones, sus opciones se ampliarán y se sentirán más seguras a la hora de afrontar los cambios. Como resultado, las personas se sentirán animadas a desarrollar su vida profesional y sus organizaciones para aprovechar las ventajas demográficas de determinadas regiones, al tiempo que fomentan comunidades activas a lo largo de su vida.
Los resultados de una encuesta de Google Workplace revelaron que la falta de interacción cara a cara entre los empleados y sus jefes creaba una sensación de inseguridad al trabajar a distancia: los jefes percibían la necesidad de vigilar más de cerca a sus equipos, mientras que los empleados percibían la necesidad de una mayor supervisión. Además, las encuestas destacan que las escasas oportunidades de establecer contactos repercuten negativamente en las perspectivas de crecimiento profesional de los empleados. Las empresas tendrán dificultades para garantizar la igualdad de trato entre los trabajadores de oficina y los trabajadores a distancia, mientras que los directivos necesitarán nuevas competencias y herramientas para garantizar el buen funcionamiento y evitar una microgestión excesiva de sus empleados.
⭐ Se espera que la mejora de la comunicación interna responda a las preocupaciones de los empleados en materia de productividad, participación, diversidad e inclusión, dando lugar a un sentimiento de conexión y comunidad entre los empleados. Sin embargo, el exceso de reuniones virtuales y la estrecha supervisión del trabajo de los empleados podrían tener un efecto contrario.
⭐ Si queremos un verdadero aprendizaje a largo plazo, las competencias deben ser transferibles. Para ello, debe establecerse un marco común de reconocimiento de competencias, tanto a escala nacional como internacional. Un sistema sólido de aprendizaje continuo, junto con una protección social universal, permite a los trabajadores asumir la responsabilidad de participar activamente en su propio aprendizaje. Esto implica anticipar las competencias necesarias para conservar su empleo, identificar cómo adquirirlas y participar en la formación necesaria, sabiendo que pueden invertir su tiempo y aceptar riesgos.
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Esperamos que este artículo te haya sido útil e interesante. ¡Gracias por leernos y hasta la próxima!
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